El monumental retraso del Gobierno socialista a la hora de pagar las obras del Plan E está suponiendo un coste asfixiante para los Ayuntamientos, muchos de los cuales ya se están arrepintiendo de haber confiado en la palabra de ZP.
Y no contento con privar a los Ayuntamientos de financiación, ofrecer sólo el parche propagandístico del Plan E y retrasar los pagos, Zapatero obliga a los ayuntamientos a endeudarse para hacer frente al adelanto del 30% del Plan E del año anterior y del 15% en el Plan de 2010. Además, el Gobierno de ZP ha reducido a la mitad las transferencias destinadas al gasto corriente municipal para destinarlo al Plan E.
¿Cuál es el problema? Que el Plan E viene condicionado porque permite emplear sólo un 20% al gasto corriente destinado a servicios educativos y sociales. Esto es la ruina para los Ayuntamientos, que han resultado ser quienes pagan el Plan con el que ZP se hace tanta propaganda.
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